LibrosPoemas

Rosa

Rosa

Tan solo un montón de huesitos pequeños /
quedó tu cuerpo en tu vestidito vacío/
poca sangre / colores tristes.
Estómago vacío/ ojitos grandes y tu mirada perdida/
como buscando algún alimento/ ese /
que no te alcanzó nadie.

En el jardín de la Republica/
cosechan mucho hambre/
resuenan machetes
de antes cañaverales/
fuegos que renuevan/
buscando
patrones que/ no te humillen ni te degraden/ ni a su imagen ni semejanza.
Borrasca en marcha,
cósmica mirada …
de hambres antiguos/
Ojitos grandes/ tu mirada perdida/ es un grito del silencio/ que no calla.
Rosa…
déjame tu espina…
aunque tenga
muchas guardadas.
Rosa
si luego de escribirte no hago nada/
si luego de leerte
no hago nada/
al mirarte en esos ojos
tus ojos me dirán:
sos la nada.
Ahora niña/ con tu imagen grabada
a la puerta me llaman:
es un quirquincho,
silencioso arquitecto
me trae una zamba
también una baguala…
busca mi complicidad
¡ para tejer algo,
más allá de las palabras !
¡Pachamama, madre protectora/ diosa de la tierra, que concibes la vida/ no dejes que me distraiga!